Brasil amenaza a Inditex con una multa millonaria por incumplir un acuerdo contra el trabajo esclavo
![]() |
Una tienda de Zara. |
Además, en lugar de mejorar las condiciones de sus suministradores, Inditex habría aprovechado para "excluir a los talleres de costura que emplean inmigrantes, independientemente de si cumplían o no la ley" y "eliminar riesgos para su imagen".
El resultado, según la ONG, fue "la pérdida del empleo para diversos inmigrantes que vieron cómo las empresas para las que trabajaban cerraban tras cortar su relación con Zara". Así, si en julio de 2012 había 35 talleres pertenecientes a inmigrantes que producían ropas para Zara en Brasil, ahora no hay ninguno. El Ministerio de Trabajo brasileño ha detectado que 31 suministradores de Zara, "en parte pertenecientes a propietarios también extranjeros, vieron comprometida su salud financiera cuando dejaron de abastecer al grupo. Muchos habrían interrumpido su producción sin saldar sus deudas con los trabajadores", según Reporter Brasil.
El ministerio brasileño ha detectado irregularidades en 83 inspecciones realizadas entre agosto de 2014 y el pasado abril en decenas de proveedores de la multinacional y de momento ha impuesto a la empresa dos multas que suman 840.000 reales (unos 250.000 euros), que Inditex ha recurrido, por considerar que ha discriminado a trabajadores y empresarios inmigrantes al excluirles de su cadena de suministradores en el país.
"En los últimos tres años, Zara Brasil trabajó con ahínco para evitar nuevos casos de trabajo esclavo en la confección de sus prendas. ¿Cómo? Eliminando empresas con inmigrantes latinoamericanos de su red de suministradores. Como ellos son las principales víctimas del trabajo esclavo en el sector, deshacerse de ellos parece haber sido la solución más fácil para proteger su imagen de marca", resume Reporter Brasil.
Inditex ha asegurado a la revista brasileña Exame que las acusaciones de las autoridades son infudadas. Dice que, de las 67 empresas investigadas por el Ministerio de Trabajo de Brasil, cinco nunca han sido suministradoras de Zara, y subraya que "únicamente el 15% de la producción de las empresas citadas en el informe" de las autoridades brasileñas se destina a Zara y el 85% se destina a otras marcas.
Las inspecciones del Ministerio fueron realizadas tras el acuerdo que Inditex firmó en 2011 con este órgano, tras descubrirse que 15 inmigrantes peruanos y bolivianos trabajaban en condiciones precarias en talleres de Sao Paulo que suministraban ropa a Zara Brasil. Inditex se comprometió tras el escándalo a someterse a esas auditorías y anunció inversiones para beneficiar a la comunidad latinoamericana de Sao Paulo, entre ellas, la donación de 6 millones para la creación de un centro de integración de inmigrantes.